jueves, 28 de abril de 2022

En llorar y en reír pasan los días en el…

MES DE ABRIL


… Y en la búsqueda de dichos y decires, proverbios y refranes, fuente de  sabiduría popular y de amenidad conversacional, pasan los días y los años. Y transcurren los cumpleaños. Sirva de ejemplo el 17 de Abril de este año, en el que este Bloguero cabalga desbocado en la segunda mitad de los noventa. "Abril, abrilillo, que no ha sido pillo", sino generoso y espléndido a todos los niveles. Casi todos los días. Y todas sus noches. 

Mas… "pelillos a la mar".

Y metidos ya en harina y puesto que "Nunca llueve a gusto de todas y todos" - especialmente de campesinos y ganaderos, agricultores - viticultores y arboricultores - el corriente Abril de este 2022, está siendo generoso para unos y  otros. Y para todos. Pues, este…



¡Abril (¡2o22!) hace los campos reír! y…

La Terraza del Opa (MJG), espléndida y vigorosa,

con caléndulas y alhelíes amarillos,

fresias multicolores y a millares verdores sonreír.

                




Y más y mejor todavía. "En llorar y en reír se le va pasando el tiempo a Abril".

Precisamente hogaño, ya en la hoja 28ª de su calendario - ... Abril es la puerta del año y mayo la cerradura: "Abril y mayo la llave de todo el año".

Para que el Refranero de este Refranista no acabe agotándose con la edad y la intemperie, periódicamente éste echa mano, y hace repaso, de alguno de  los manuales sobre la materia que, empolvados, pueblan las estanterías de "nuestra biblioteca". Manuales recomendables para amantes de refranes, dichos y decires. Fuente de amenidad, pasatiempo y sabiduría populares:


Refranes de la Temperie (José Sánchez Egea)

El porqué de los dichos (José María Iribarren)

Refranero español (José Bergua)

12.600 Refranes más (Francisco Rodríguez Marín)

 


Seguidamente ofrezco, para divertimento y pasatiempo meteorológicos de mis lectores Blogueros, una docena de Refranes sobre el Mes de Abril. Alguno de ellos invención de este refranista:

 

1. Abril frío mucho pan y poco vino

2. Abril uno bueno entre mil

3. Abriles y caballeros de ciento uno bueno

4. Mes de Abril de cien en cien debieras venir. Y la vieja que lo dijo vivió ciento uno y no conoció ninguno 

5. Abril abrilete más malo que siete. Llama a mayo y vete

6. Las aguas de Abril todas caben en un barril, pero si el  barril está desfondado, todo el campo está anegado

7. Abril siempre fue vil: al entrar o al salir. O al medio por no mentir

8. Abril cerril: nubes y soles, lluvias y fríos sin fin (MJG)

9. Es buen tiempo cuando en cada tiempo hace su tiempo

10. Más valen las aguas de Abril que los bueyes y el carro de David

11. Parte su tiempo Abril en llorar y en reír

12. Abril abrilete coge el portante y vete


lunes, 4 de abril de 2022

Saltando la valla del vecino

(De esto, aquello y lo de más allá)

¿Qué estás leyendo ahora?, suele ser la pregunta archirrepetida - más frecuente por tanto - no solo por familiares más próximos, si no también por amigos - lectores: próximos y lejanos.  

Metidos ya en harina, y sobrepasada la obligatoria lectura navideña de cuentos de toda índole y autoría, quedaban aún pendiente, en la mesa de mi despacho, Nuevos cuentos de andar y soñar (obra del popular filólogo, fotógrafo y profesor políglota universitario salmantino, Luis Cortés Vázquez, +1990). Cuentos nuevos ya viejos. Arcaicos. Escritos y publicados por los años ochenta del pasado siglo. Sueños de andariego - soñador. Localistas y provincianos. Charros y sayagueses. Es decir: salmantinos y zamoranos. Y también franceses. Memorables y entrañables todos para este lector bloguero. Librito plagado de arcaísmos, latinismos, barbarismos y neologismos originales y llamativos. Provocador a veces, pero principalmente sugestivo por las dedicatorias a salmantinos ilustres: contemporáneos del autor y de este Bloguero. Dos de ellas dedicadas a su esposa: madame Paulette, lectora y profesora de francés y filología francesa en la Facultad salmantina de Letras: "A Paulette en un aniversario de su nacimiento" en el titulado "La falda provenzal" el primero,  y "A mi compañera de andadura" en el cuento de "El Camino" el segundo. 

No puedo pasar por alto la impactante noticia  publicitaria con que me tropecé fortuitamente hace unos días. Perdón por el paréntesis: "Paulette Gabaudan de Cortés […] La salmantina que se convierte en superventas a los 94 años en la Feria municipal del Libro con "Un imperio mítico": estudio iconológico de los relieves del edificio de las Escuelas Mayores de la Universidad de Salamanca sobre la fachada de su Universidad.

Retornando a las dedicatorias impactantes. Sorprendente e inesperada es la del cuento "Nocturno en la catedra ", que reza: "A la memoria de dos hombres buenos - Dámaso y Manuel. Sacerdotes". Dedicatoria que me llegó al alma, pues "los dos hombres buenos" eran dos de los "amigos" - ¡fidelísimos! -  desde la adolescencia: Dámaso García, el grandón en la foto adjunta, escoltado por dos Manueles: Manuel Cuesta Palomero el de su izquierda y Manuel Almeida Cuesta el de su derecha, me apreciaba con locura inmerecida. ¡La primera felicitación familiar navideña - cuando éstas eran tradicional costumbre - era siempre la suya! Siempre acompañada de alguna estampa famosa de la Virgen y de poema propio, pues presumía de paisanaje - (Frades de la Sierra, Salamanca) - de su adorado José María Gabriel y Galán (1870-1905), popular poeta salmantino - extremeño, también muy estimado en mi adolescencia y juventud - y de quien conservo - adquirida en anticuario - edición "valiosa" completa de su obra: OBRAS COMPLETAS : CASTELLANAS - NUEVAS CASTELLANAS - EXTREMEÑAS. 18ª Edición - Editorial FE, Puerta del Sol - Madrid 1935.

Dámaso era persona siempre alegre, cordial y generosa. Presumiendo siempre de "vivir de milagro". Pues, desahuciado en su juventud por tuberculosis - frecuente enfermedad en nuestra infancia - en el sanatorio antituberculoso salmantino de Los Montalbos, disfrutaba de la vida de jubilado -¡dando gracias a Dios y presumiendo de vivir de milagro!

Mas volviendo al cuento de la dedicatoria a "dos hombres buenos", continuará indecifrable la incógnita de cuál de los dos Manueles - Manolo Almeida o Manolo Cuesta - era el "Manuel buenhombre" para Luis Cortés. Cuestión baladí. Lo que sí es cierto - y de ello doy fe - como único superviviente del cuarteto - es que tanto Dámaso como los dos Manueles fueron amigos "amigos buenos" y de verdad, del tercer Manuel del grupo, Manuel José González. 

"El hombre propone y Dios dispone"
Prueba de que la amistad del trío de los tres Manueles del curso fue histórica lo demuestra la fotocopia de la carta que Manolo Cuesta acompaña a la foto adjunta del cuarteto, anunciando la celebración del Encuentro Estival organizado por Manolo Cuesta. Encuentro anual  de los supervivientes jubilados del curso - sacerdotes y seglares - en el pueblo de uno de ellos: concelebración en la iglesia y comida comunitaria, distendida - amena e interminable, en restaurante del pueblo o pueblos de la zona. 

"El siguiente año" sería Manuel José, como llamaban a este bloguero todos los compañeros de curso. Pero… un mes escaso de la carta fechada en agosto de 2007, concretamente a mediados del Septiembre de ese mismo año, un infarto nos llevaba para siempre a Manolo Cuesta celebrando misa para un grupo de excursionistas en Israel: en Canáa de Galilea, escenario de las bíblicas bodas. Popular, dinámico y emprendedor, activo y generoso, el trotamundos misionero, Manolo Cuesta ponía punto final - con esta carta - a la histórica amistad de décadas y al inolvidable encuentro veraniego. Pues… el otro Manuel anónimo, el otro "buenhombre" de la dedicatoria, el último condiscípulo entrañable, cordial y fiel, Manolo Almeida Cuesta, bautizador de "nuestro" nieto Martín, el pequeño de la saga de los González, en la iglesia del pueblo natal del Opa, Carrascal de Velambélez, moría dos años después. En 2009, en fecha y lugar desconocidos. La noticia de su muerte me llegaba  a través de la impactante noticia de su funeral en la salmantina iglesia popular de La Purísima. Multitudinaria celebración de amigos y conocidos. Fieles asistentes llenaban la iglesia formando cola, incluso en el exterior del templo con las puertas abiertas.

De "san Dámaso", como solíamos llamar al otro compañero del grupo, no volví a tener noticia. Estoy sumamente convencido de que, siendo como era dechado de humildad, sencillez y religiosidad, habría ordenado - de palabra o por escrito - no hacer publicidad de su defunción en la prensa local con la habitual esquela mortuoria. Costumbre, hoy en decadencia - pero antaño símbolo de categoría social  el tamaño de la esquela. 

El tercero de los Manolos - el Manuel José del curso - y único superviviente de la cuadrilla, autor de este Blog, prosigue dando fe de la fe que nos unió y del valor de la Amistad verdadera. Sirva de ejemplo el presente capítulo con tonalidades de vieja historieta y en vísperas del arribo a los 96 tacos. 


(Majadahonda Abril 2022)